O lo amas o lo odias. Los bigotes no tienen términos medios. Pero lo cierto es que este recurso estilístico tan propio de los años 80 ha vuelto pisando fuerte y son muchos los modernos que se dejan crecer el mostacho. Y es que todo vuelve.
Brad Pitt
Brad Pitt es el modelo (físico) de hombre que toda persona interesada en el género masculino desearía tener en casa. Aunque lo cierto es que su bigotillo inglés no es su mejor etapa estilística.
Arón Piper
Arón Piper pasó de su etapa imberbe como adolescente adinerado en Élite a este bigote lápiz que tan de moda está y que tan rara vez sienta bien.
Chris Evans
Miro a Chris Evans en esta imagen y no puedo evitar acordarme de Tom Selleck, el eterno Richard de Friends. Pero no, estamos ante el mismísimo Capitán América, que tuvo que dejarse este mostacho tipo Chevron para su película El agente invisible.
Henry Cavill
Henry Cavill también tuvo que llevar bigote en una etapa de su carrera por exigencias del guion para la película Misión Imposible 7. El problema fue que el rodaje coincidió con otro filme, La liga de la justicia, y tuvo que grabar todas las secuencias de Superman con mostacho. ¿Qué ocurrió? Que tuvieron que quitárselo con ordenador con resultados un tanto dudosos.
Hugo Silva
En El Ministerio del Tiempo, Hugo Silva interpretaba a un policía quinqui de los años 80, y sus patillas y bigote reforzaban esa imagen. Con un ligero aire a Lobezno, Silva mantuvo este look durante un tiempo y, aunque no fue su mejor momento, a sus fans tampoco pareció importarles demasiado.
Jacob Elordi
Elordi nos ha sorprendido este año sumándose a la moda del bigote y optando por uno tipo puberto, que es como se llama a ese tipo de bigotes poco poblados de aquellos a los que la barba no les sale demasiado cerrada. Puede ser consecuencia de la edad o simplemente del crecimiento del vello, pero da como resultado un bigote discreto y, como podéis ver en la imagen, bien cuidado.
Javier Rey
El actor (y pareja de Blanca Suárez) es de las pocas personas a los que le queda mejor llevar bigote que no llevarlo. Cuando se afeita parece que le falte algo en la cara. Además, su mostacho es tupido, como los que lucían los hombres rudos de antes, y le da un aspecto masculino muy favorecedor.
Joe Jonas
Al contrario de lo que le ocurre a Javier Rey, Joe Jonas no ha nacido para llevar bigote. O al menos no ese bigote poblado tan típico de nuestros abuelos.
Justin Bieber
Otro al que todavía no le sale el bigote. Justin Bieber lo llevó durante una temporada pero, al contrario que Jacob Elordi, él optaba por no arreglárselo demasiado adquiriendo un aspecto desaliñado muy en consonancia con el resto de su atuendo.
Milo Ventimiglia
Ventimiglia se dejó crecer el bigote para su papel como Jack Pearson en la exitosa serie This Is Us consiguiendo un aspecto muy años 80. No podemos decir que le quede mal pero bien, lo que se dice bien, tampoco.
Ricky Martin
El cantante de Un pasito p’alante María no siempre ha optado por los adornos faciales, pero el paso de los años te hace probar de todo. En esta ocasión optó por un bigote lápiz, quizá para emular a los grandes del cine mudo, pero lo que jamás podremos perdonarle es la mosca, ese cúmulo de pelo bajo el labio inferior. ¿Por qué, Señor, por qué?
Zac Efron
Terminamos nuestra lista por Zac Efron, ese actor de rostro angelical que se convirtió en un hombre rudo a causa de una operación de mandíbula. Pues a sus nuevas y marcadas facciones hay que sumarle un bigote chevron que tuvo que llevar debido a su papel en la película Yo me encargo de la cerveza.