Allá por la lejana década de los 80 del siglo pasado, una pareja irlandesa tenía un sueño: triunfar en la música. Juntos formando una banda llamada Sound Affair, con la que actuaban por todos los pubs de la localidad interpretando versiones de ABBA o los Eagles.
Pero además de la música, Gerry y Jean Corr también tenían otra pasión: tener hijos. Cuatro fueron los niños que trajeron a este mundo, quienes les acompañaron en todas sus actuaciones por los pubs irlandeses.
Gerry y Jean no consiguieron triunfar (la muerte de Jean quizá tuvo gran parte de culpa), pero sus hijos heredaron ese sueño, y comenzaron a prepararse para ello aprendiendo a tocar varios instrumentos.
Ese fue el germen de The Corrs, un grupo que triunfó en los 90 y que tenía como integrantes a estos cuatro hermanos del cuento: Andrea, Caroline, Jim y Sharon. En un primer momento quisieron llamarse The Cosmic Egg (El Huevo Cósmico), pero afortunadamente, su primer productor, David Foster, les quitó esa idea de la cabeza. Aunque nombres más raros han triunfado, ¿eh, Red Hot Chili Peppers?
Así fue como, en 1995 y ya como The Corrs, lanzarían su primer álbum titulado Forgiven, Not Forgotten, de donde salieron éxitos como Runaway o el tema que da título al disco. Su mezcla de pop-rock con música tradicional irlandesa les abrió un hueco en el mercado internacional, llegando a actuar en los Juegos Olímpicos de Atlanta y a telonear a Celine Dion.
En 1997 les siguió su disco más aclamado, Talk On Corners, cuyo primer sencillo fue Only When I Sleep. Este disco llegó al número 1 de la lista de ventas de Reino Unido, resucitando las ventas de su primer disco, que se posicionó en el número 2. Para que entiendas la magnitud del éxito de los hermanos Corr, esta situación solo la habían logrado los Beatles y Mike Oldfield.
El nuevo milenio llegó para ellos con el duelo tras la muerte de su madre, Jean Corr, que trataron de superar con la publicación de su tercer álbum de estudio In Blue. Este fue el momento en el que conquistaron el mercado estadounidense gracias al sencillo Breathless, que se convirtió en número 1.
Ocurrieron varias cosas antes de editar su siguiente álbum, Borrowed Heaven, cuatro años después. Editaron un recopilatorio con la colaboración de Alejandro Sanz, cantaron junto a Bono (U2) y Ron Wood (Rolling Stones), Sharon y Caroline se casaron y Andrea debutó en el cine, lo que le valió un galardón y varias nominaciones. Pero después de este disco, y de otro con temas tradicionales irlandeses titulado Home, se tomaron un descanso.
Después de nueve años, en los que los integrantes de The Corrs se dedicaron a sus familias y sus carreras en solitario, regresaron en 2015 con el álbum White Light, siendo el primer sencillo Bring on the night. Ante la buena acogida de la gira de regreso, en 2017 editaron su séptimo trabajo de estudio, Jupiter Calling, pero la euforia les duró poco y volvieron a tomarse un descanso.
En esta ocasión sólo se tomaron un año para tomar aliento, regresando con una gira que recorrió Indonesia, Filipinas, Australia y Nueva Zelanda con gran éxito. Así han continuado, encadenando concierto tras concierto hasta ahora, que continúan ofreciendo conciertos juntos a lo largo y ancho del globo.