Cillian Murphy nació en Irlanda, el 25 de mayo de 1976. Es decir, a día de hoy tiene 47 años.
Y a pesar de ello, cualquiera que le haya visto en algunas de las premieres de Oppenheimer, la película de Christopher Nolan que él mismo protagoniza, se habrá preguntado: “¿Qué le pasa?” No tiene buena cara“.
Por un lado, la imagen que el público tiene de Cillian Murphy es la del todopoderoso Tommy Shelby, protagonista de la serie Peaky Blinders. Por otro lado, el actor se ha recorrido medio mundo posando junto a Emily Blunt y Florence Pugh, lo que hace que el tercero en discordia en esas fotos, siempre parezca tener peor cara que estas dos divas de Hollywood.
Pero la realidad es que el actor se ha visto obligado a asumir tremendo cambio físico para dar vida a J. Robert Oppenheimer, el creador de la bomba atómica en época de la II Guerra Mundial. “Era como si estuviera en un tren que está siendo bombardeado. Duermes unas horas, te levantas y explosiones otra vez. Tenía muchísima energía y llegué a un punto en el que ni me preocupaba la comida, algo que era bueno porque el personaje era así, nunca comía“, comentaba el actor en una entrevista a The Guardian.
Y es que el personaje, en vez de comer, “alternaba Martinis, cigarrillos y pipas”, según comenta el propio Cillian Murphy. De hecho, acabaría muriendo de cáncer en 1967. Obviamente, el aspecto de J. Robert Oppenheimer era tan delgado como el actor ha querido recrear en la película, con las consecuencias físicas que esto conlleva. Entre ellos, que Cillian Murphy parezca estar viendo a la muerte saludarle, cada vez que pone la mirada perdida en un photocall.
Emily Blunt, compañera de reparto, confirmó la mayor y cómo Cillian Murphy llevó su método interpretativo al extremo. “Estábamos todos en el mismo hotel y cuando íbamos a cenar, lamentablemente, Cillian Murphy no se unía a la diversión, por culpa de su personaje. El volumen de lo que tuvo que asumir es monumental”, comentaba la actriz en una entrevista a People.
En esa misma entrevista, Cillian Murphy se venía un poco arriba, con la vista puesta, claramente, en la nominación al Oscar. “Sabes que cuando tienes esos papeles importantes, esa responsabilidad, sientes que es un poco abrumadora“. Lo abrumador va a ser como a la Academia no le guste su papel o resulte que hay otros cinco actores que lo han hecho mejor. Ahí sí que va a echar de menos las cenas no tomadas y los ratos de asueto con los compañeros.
Dicho lo cual, Cillian Murphy tiene claro el consejo para quien quiera perder peso para cualquier otro papel. “No lo recomiendo. Te vuelves competitivo contigo mismo y no es sano“. Tal es así, que el actor no ha querido desvelar cuánto peso perdió exactamente para el papel, para evitar titulares tipo “Cillian ha perdido x peso para el personaje”. Bien jugado.
JESÚS REDONDO
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