José Rojo, Pacheta, entrenador del Valladolid, se ha coronado este domingo en sala de prensa como entrenador pero, sobre todo, como ser humano.
El Valladolid, en plena lucha por eludir el descenso a Segunda División, jugaba un partido crucial ante el Espanyol, rival directo por la permanencia.
Para afrontar el choque, Pacheta decidió prescindir de Javi Sánchez, central titular de los pucelanos y uno de sus baluartes defensivos. ¿El motivo? Su pareja iba a dar a luz y quería estar presente en el nacimiento.
Eso sí, el jugador tuvo sus dudas, como confesó el entrenador en rueda de prensa, y fue el propio Pacheta quién le animó a que se fuera con su pareja, viviera la experiencia y se olvidara del fútbol.
Curiosamente, Pacheta ha tenido que justificar esta decisión, a preguntas de los medios. La reflexión que ha dejado el entrenador ha sido tan humana, sencilla y directa que no debería dejar lugar a dudas a ningún aficionado que pueda llegar a dudar entre el nacimiento de un hijo o un partido Liga a principios de marzo.
“Lo de Javi Sánchez es una cuestión de humanidad. Lo normal es que tengas una situación como la de hoy, una o dos veces en la vida. El chico dudaba y le dije que fuera con su mujer porque nunca se sabe qué puede pasar. Y la emoción de ver el nacimiento de un hijo, no hay nada más importante en la vida. No hay discusión. Partido de fútbol muy importante, jugó otro compañero, hemos ganado, él estuvo con su mujer. Todos contentos”, apuntaba Pacheta en sala de prensa.
Por cierto, el Valladolid ganó 2-1 al Espanyol, incluso con la ausencia de Javi Sánchez. Es más, ¿alguien cree que el central habría rendido al 100%, sabiendo que su pareja está dando a luz y él se lo está perdiendo? En el fútbol no todo es físico, la mente es aún más importante y tener la concentración al máximo es imprescindible para la máxima competición. Pacheta la ha tenido para afrontar una situación en la que no todos los entrenadores habrían actuado como él.
Hace varios años, cuando Sarunas Jasikevicius era entrenador del Zalgiris Kaunas, pasó algo parecido con Augusto Lima, a quien dio permiso para irse al nacimiento de su hijo, en plenas semifinales por la Liga. Su respuesta, muy en la línea de Pacheta, incluyó un reto al periodista que le interpeló: “Cuando seas padre, vienes y me hablas“.
Noticias Relacionadas
Criptomonedas, drogas, ictus: Kiko Rivera en ‘La Resistencia’
Kiko Rivera ha pasado por La Resistencia y, como es habitual, no ha defraudado. El DJ puede caer mejor o peor, pero es innegable su magnetismo como…
Recordando a las estrellas del cine español de los 90
Es posible que alguno de los nombres que vamos a repasar permanezcan en esa zona de lo sombra que casi linda con el olvido. Injustamente.…
La leyenda y muerte de Sandra Mozarowsky será una película
Tenía 18 años cuando su cuerpo se precipitó al vacío desde la terraza de su domicilio madrileño, en el número 3 de la calle Álvarez…