Ana García-Siñeriz: mi álbum de fotos de Asturias
Ana García-Siñeriz: mi álbum de fotos de Asturias
La periodista y escritora Ana García-Siñeriz siempre ha llevado muy a gala sus orígenes asturianos. Nacida en Oviedo, su familia procede del Occidente, pero aunque creció en Madrid, siempre ha tenido Asturias muy presente. Entre libro y libro de La Banda de Zoé– la exitosa colección infantil que escribe y que ilustra su amigo Jordi Labanda –Ana nos hace un hueco para darnos sus direcciones favoritas en tierra asturiana. Y comparte su álbum de fotos personal, en el que no faltan paisajes maravillosos, visitas a lugares tan emblemáticos como el Centro Niemeyer, en Avilés, y, naturalmente, recomendaciones gastronómicas.
¿Playa o montaña?
Las playas asturianas son de las más bonitas de España. Entre mis favoritas está la Playa del Silencio, en Cudillero, con esos acantilados impresionantes, y un entorno espectacular. Cuesta un poco llegar, pero eso tiene su recompensa porque nunca la encontraremos abarrotada de gente.
Aparte, la de Peñarronda, entre Castropol y Tapia de Casariego, es también una de mis favoritas.
Y luego hay otra cosa que me encanta, y es que en Asturias, la playa y la montaña nunca están demasiado lejos. En una hora, en el coche, vas de las arenas doradas y del agua del azul más intenso a las laderas de una estación de esquí.
¿Hotel o casa rural?
Pues cada cosa tiene su momento. A mí me encanta el hotel de la Reconquista en Oviedo, por ejemplo, donde me he alojado en alguna ocasión especial, con Canal+, y que es un lugar mítico y conocido mundialmente entre otras cosas por los Premios Princesa de Asturias..
Y pasé un fin de semana maravilloso en el hotel Las Caldas Villa Termal. Tiene una zona de aguas y de spa increíble. Es la manera perfecta de empezar un recorrido por Asturias, arrancando desde Oviedo, si vas en avión, y disfrutando de la ciudad y su gastronomía.
Pero cuando se trata de recorrer a Asturias de una punta a otra, hay casas rurales maravillosas, muy cuidadas y donde los anfitriones cuidan hasta el último detalle. Incluso te diría que en Asturias se va más allá que en otros lugares en lo que se refiere a alojamientos rurales con encanto: véase cómo son las Casonas Asturianas o las Aldeas de Asturias.
Y es que hay algo que sabe poca gente: el turismo rural nació precisamente en Asturias y se cumplen 30 años de ello.
En cuanto a alojamientos favoritos: creo que un lugar ideal para descansar es La Rectoral de Taramundi (¡fue el primer hotel rural que logró las cuatro estrellas!); en la zona de Oriente, me gusta mucho ir de vez en cuando a El Babú, entre la playa y la montaña. Tiene unas vistas que te cortan el aliento, y los propietarios hacen que te sientas como en casa. Su entorno tiene lo mejor de Asturias: el verde del Hayedo de la Biescona y las playas de Vega y la Espasa, adonde van muchos surferos. Ya solo me falta aprender a hacer surf...
Los hoteles asturianos son buenísimos pero, por encima de todo, hay una enorme cantidad de casas rurales de altísimo nivel que hacen que viajar por Asturias sea un verdadero placer. ¡Y cómo se come!
¿Tú eres de Oviedo, no?¿Qué es lo que más te gusta de tu tierra?
¡Me gusta todo! Lo que más, las pastelerías . Me gustan mucho los carbayones, las princesitas, y también las famosas moscovitas.
Mis abuelos me traían bombones cuando iban a Asturias porque decían que eran las mejores del mundo, y siempre que voy aprovecho para comer en alguno de los sitios donde hacen unas fabes exquisitas. La gastronomía asturiana es un atractivo turístico muy importante, y debería conocerse más de lo que ya es. Yo me relamo pensando en un buen arroz con leche (de vaca asturiana...por supuesto).
Aparte, culturalmente es muy interesante. De entrada, el conjunto monumental asombroso, y cuenta con varias edificiaciones declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Hay obras del prerrománico como Santa María del Naranco o San Miguel de Lillo que son imprescindibles.
Y también está el Museo de las Bellas Artes de Asturias, un museo muy completo que abarca desde el siglo XIV a nuetros días, y donde podemos admirar obras de Picasso, Sorolla, Zurbarán o un apostolado completo de El Greco.
Como las tres principales ciudades asturianas están a apenas 15 minutos en coche, tengo que preguntarte: ¿has estado alguna vez en Avilés?
Sí, y es uno de mis destinos favoritos cuando voy a Asturias.
He disfrutado mucho combinando actividades culturales, como la visita al Centro Niemeyer, todo un lujo para Asturias, con propuestas en las playas cercanas o un poco de turismo gastronómico.
Por ejemplo, un retaurante asturiano imprescindible de Avilés es Casa Tataguyo, miembro de la marca calidad Mesas de Asturias, aunque hay otras muchas propuestas como la terraza Ewan en la playa de Salinas, a unos pocos kilómetros de Avilés.
¿Y Gijón? ¿Alguna rivalidad, como ovetense?
En mi caso, ninguna. De hecho, incluso presenté hace unos cuantos años su festival de cine, y tengo que reconocer que además de lo puramente profesional, fue una estancia estupenda. Lo pasé muy bien con los gijoneses; hay muchos sitios muy divertidos para salir por la noche y la gente es muy simpática y acogedora.
Gijón es una ciudad muy viva, y culturalmente, hoy día a la vanguardia con la Laboral, Ciudad de la Cultura en la que se encuentra LABoral, el centro de arte, con conciertos y actividades culturales que se inscribe en una red europea de creación audiovisual contemporánea: una red de la que forman parte otros organismos similares en Francia, Alemania o incluso Serbia. Y encima, Gijón es el lugar ideal donde beber una sidrina al aire libre, al modo asturiano.
¿Qué te inspira la naturaleza asturiana?
Belleza, paz, verdor...naturaleza en estado puro. Para mí no hay nada como un paseo por entre los bosques asturianos, pisando hojas y oliendo a musgos y a cortezas de árboles, y llegar hasta la playa, atravesando prados. Es un turismo de calidad, muy sano e ideal para quienes gustan de la naturaleza lejos de las aglomeraciones. Cada vez me gusta más volver a Asturias.
Eso, sin contar con que Asturias cuenta con seis reservas de la biosfera de la UNESCO; quizás las más conocidas son los Picos de Europa, pero Somiedo, Oscos-Eo, Redes, Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias o Las Ubiñas-La Mesa son auténticas maravillas, para quienes quieren un turismo al margen de los senderos trillados.
Y para terminar, un lugar al que siempre quieras volver...
Si hablamos de naturaleza, sin duda, los Picos de Europa. Sus paisajes te reconcilian con la vida y no concibo un lugar mejor para pasar unos días alejada del estrés.
A mí me carga las pilas. Picos de Europa fue el primer Parque Nacional que hubo en España.
Y para un almuerzo inolvidable, camino a los Picos de Europa, una última recomendación: El corral del Indianu, en Arriondas. Pero lo bueno de Asturias es que se come bien en todas partes, y con cualquier presupuesto, y en donde pongas la vista, siempre es maravillosa.
Fotos: Turismo de Asturias, Ana García-Siñeriz