Pocas tendencias son tan inmortales como la falda de cuadros, probablemente por su versatilidad. Y es que puede dar un aspecto sobrio y elegante en su versión tweed; más sensual con un look de colegiala; o vestir a las más radicales con la estética punk. Una falda de cuadros es un imprescindible en tu fondo de armario.
Todo a conjunto
Sarah Jessica Parker es igual de fashionista que su eterno personaje de Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York. Así la podíamos ver por las calles neoyorkinas, con una falda midi tartán (vamos, los cuadros de toda la vida) en los mismos tonos de azul que su jersey de punto con los puños de pedrería. ¿Como colofón del conjunto? Unas medias a tono con el jersey.
Estética punk
A Gwen Stefani le chifla la estética punk y una falda de cuadros es la prenda ideal para conseguirla. Pero la cantante de Don’t Speak riza el rizo y combina su falda de tablas y estampado de cuadros con un pantalón de campana con el mismo estampado. ¿Queda bien? No. Pero al fin y al cabo, era para un show en Los Angeles.
Conjunto sport clásico
Bella Hadid también apuesta por los cuadros en una versión sport un poco más clásica. Así, ha escogido una falda midi de tubo que combina con una sudadera con cuello alado, calcetines blancos subidos y botines deportivos negros.
Le robó la ropa a su abuela
La cantante Billie Eilish es una mujer de extremos estilisticamente hablando y tan pronto apuesta por la estética grunge, como abre el armario de su abuela. En esta ocasión ha elegido la segunda opción y ha combinado su falda de tweed de Chanel con una blazer negra y una camisa abotonada con un llamativo cuello. Para completar la estética retro eligió un bolso de Gucci con estampado de pata de gallo, combinado con calcetines blancos y zapatos Mary Jane de charol. Cuestionable cuanto menos.
La tendencia que nunca muere
Pero la falda de cuadros es una tendencia muy antigua que siempre está de moda. En 1950 ya la llevaba la actriz Janet Leigh, combinándola con un chal con el mismo estampado y una camisa verde.
Todo vale
La protagonista del reality Selling Sunset, Chelsea Lazkani, fue vista por las calles de Los Angeles con un conjunto formado por una falda larga de cuadros y un top palabra de honor con el mismo estampado. Como veis, la falda de cuadros es tendencia en cualquier formato, corto, largo, de tablas, de tubo…
La llevan hasta las royal
Kate Middleton tampoco dudó en recurrir a una falda de cuadros en 2018. Para acudir a una cita en el Palacio de Kensington, la Princesa de Gales optó por dejar todo el protagonismo en manos de esta prenda firmada por la londinense Emilia Wickstead. Para no restarle fuerza, apostó por un cárdigan negro abotonado de cashmere y manga francesa y botines altos de terciopelo negro.
Excentricidad
Julia Fox, que saltó a la fama por ser pareja de Kanye West cuando éste se separó de Kim Kardashian, siempre ha sido un tanto excéntrica en sus looks y en esta ocasión no iba a ser menos. La actriz ha decidido versionar el look de colegiala con una falda de diversos estampados de cuadros, combinada con una camisa con un corte diferente y unos botines de gran plataforma.
Inocencia
La chica Disney Olivia Rodrigo visitó la Casa Blanca queriendo mostrar una imagen de candidez. Para ello, nada mejor que un traje de tweed en tonos rosas. Y es que el estampado de cuadros es muy versátil.
Una vuelta de tuerca
La actriz Rachel Brosnahan sabe que el look de colegiala está muy manido, así que decidió darle una vuelta. La falda de cuadros es un imprescindible, pero la camisa siempre puede convertirse en cropped y las manoletinas en botines de tacón. ¿Resultado? Un look de colegiala sexy. Que sí, también está bastante manido.