Reconozco que Aitana siempre ha sido mi niña bonita. Desde que apareció en pantalla en la edición de Operación Triunfo de 2017 fue mi favorita, por delante incluso de Amaia, y mira que la pamplonica es maravillosa. Pero esa mezcla de ingenuidad y fuerza, esa potencia de voz encerrada en un cuerpo tan pequeñito, me resultó atrayente desde el primer momento.
Además, al salir tomó las riendas de su propia carrera y, aunque emprendió el camino del pop más comercial, ha sabido sacarle rentabilidad a su voz y su carisma.
Siete años en los que la catalana no ha parado y que ahora nos lo muestra en su nuevo documental para Netflix: Metamorfosis.
“Este documental es mostrarle a la gente todo lo que hay detrás. Que no soy perfecta y que… pues que ya no me importa”, dice la cantante en el tráiler de Metamorfosis.
Un documental de seis capítulos en los que no sólo mostrará sus logros profesionales sino también sus baches emocionales.
De qué va ‘Metamorfosis’
La producción ha sido dirigida por Chloe Wallace, conocida por Un Cuento Perfecto, adaptación de la novela de Elisabet Benavent Y así como esta serie no era perfecta a pesar de su título, Aitana quiere en este documental mostrar sus luces y sus sombras, sus éxitos y sus debilidades.
Quiere enseñar a sus fans que es humana y que aunque parezca inalcanzable cuando se sube al escenario, es más vulnerable de lo que muchos piensan.
“Nunca me había dado un bajón tan grande como el de este último año. Sentía que empezaba a no ser feliz y no sabía por qué. Me siento muy agradecida, tengo un montón de cosas increíbles, pero también puedo estar mal y no me tengo que sentir culpable”, dijo la cantante de Los Ángeles. Y eso es una parte importante de Metamorfosis, el viaje de maduración de Aitana, que saltó a la fama con sólo 18 años y que ha tenido que vivir mucho y muy deprisa.
La artista contará cómo es subirse a un escenario frente a miles de personas, cómo es su día a día, el proceso de composición de sus temas… pero también cómo se enfrenta a la prensa, a la opinión pública y las consecuencias que todo esto tiene para su salud mental.
Porque parece que se nos olvida, pero Aitana tiene sólo 25 años y lleva desde los 18 siendo juzgada a diario por lo que hace y, en muchas ocasiones, por lo que los demás piensan que hace. Veremos cómo lo lleva en Netflix a partir del 28 de febrero.
SARA FLAMENCO
