Las confesiones de Dwight Schrute

Hablar de la versión norteamericana de The Office, es hablar de una de las mejores comedias del siglo XXI y un referente del sector. Una sitcom que cambió la realidad de las comedias y que ya es una serie de culto por su humor y sus personajes legendarios.

Uno de ellos, sin lugar a dudas, era Dwight Schrute, a quien daba vida Rainn Wilson. Su personaje, por momentos, opacó a toda una leyenda como el Michael Scott de Steve Carell y, claro, esto acabó por afectar al actor, quien se pensó más de lo que era, sin llegar a disfrutar el momentazo que estaba viviendo.

“Durante varios años fue realmente infeliz porque no era suficiente“, ha confesado Rainn Wilson en el podcast Club Random de Bill Maher. “Me estoy dando cuenta ahora que estaba en una serie de éxito, nominado a los Emmy todos los años y ganando muchísimo dinero, además de trabajar con Steve Carell, Jenna Fisher, John Krasinski y todos esos guionistas y directores increíbles, como Paul Feige. Estaba en una de las mejores series de televisión, a la gente le encanta y yo no lo estaba disfrutando”, asegura.

Sí, el ego le jugó una mala pasada a un actor que es una referencia en la comedia pero quería más. “Pensaba que estaba en una gran serie que le encantaba a la gente y me preguntaba por qué no era una estrella de cine. Por qué no era el próximo Jack Black o Will Ferrell. Por qué no tenía una carrera en el cine“, recuerda.

Rainn Wilson asegura que su ambición estaba desmedida y el éxito sin precedentes de The Office no le colmaba, él quería ser una gran estrella de Hollywood y ganar millones de dólares por cada proyecto. De hecho, tardó bastante en darse cuenta de esta situación, incluso con la serie ya terminada.

Fue en 2020, como recuerda, cuando en pleno confinamiento, The Office se elevó como una de las ficciones más vistas en streaming, en un momento donde el consumo se disparó en todo el mundo. Fue una serie terapéutica para millones de personas y ahí es cuando Rainn Wilson fue consciente de la dimensión de la comedia y de su personaje. “No soy capaz de decirte cuántas veces al día, tanto online como en persona, la gente me da la gracias por The Office, las risas que les dio y cómo les ayudó durante el Covid”. Cuando firmé no era consciente que el humor podía ser terapéutico. Fue un honor formar parte de algo como eso“, concluye un Rainn Wilson que ha tardado pero ha llegado donde la serie merecía.