Las dos raras condiciones de David Lynch a Spielberg

David Lynch es un tipo peculiar y le encanta serlo. De hecho, cada vez que tiene ocasión, explota esa versión suya de tipo extraño con un talento descomunal.

Obviamente, cuando Steven Spielberg te llama para aparecer en su última película, tienes la ocasión pintiparada para recordar al mundo que eres David Lynch, el tipo que hizo Twin Peaks serie en la que llegó a dar vida al agente Gordon Cole. Y es que en Los Fabelman, último trabajo del Rey Midas de Hollywood, Spielberg quería que David Lynch formara parte del reparto, dando vida al legendario director John Ford, no que estuviera tras las cámaras pero David Lynch no estaba muy por la labor y le dio varias negativas antes de aceptar.

¿Cómo consiguió Spielberg el sí de Lynch? Por un lado, tirando de Laura Dern, amiga común de ambos, quien parece que insistió bastante en que aceptar. Y, por otro lado, aceptando las dos condiciones que David Lynch le impuso.

La primera condición fue que Spielberg le enviara el vestuario que llevaría en la película, dos semanas antes de comenzar el rodaje, pues David Lynch aseguró que quería llevarlo todos los días puesto. La segunda y más gloriosa condición fueron Cheetos. Muchos Cheetos. Que su camerino siempre estuviera lleno de Cheetos. Y así fue.

Es más, cuando terminó el rodaje, David Lynch preguntó si podía llevarse las bolsas de Cheetos que habían sobrado a su casa, a lo que el equipo de producción, obviamente, accedió sin problemas.

Así es como Steven Spielberg consiguió que David Lynch forme parte de Los Fabelman, junto a gente como Michelle Williams, Seth Rogen, Gabriel LaBelle o Paul Dano. Una cinta que llegará a los cines españoles el próximo 10 de febrero de 2023 y que está llamada a ser una de las grandes protagonistas de los Oscar