Sarah Connor está de vuelta. Linda Hamilton, la actriz que daba vida a la heroína que se enfrenta a Arnold Schwarzenegger en Terminator, será una de las nuevas caras de la esperadísima última temporada de Stranger Things. La actriz, que había pensado en retirarse antes de ser fichada para la serie de Netflix, ha tenido una larga carrera. Recordémosla.
De la arqueología al cine
Linda Hamilton quería ser arqueóloga, pero finalmente se decantó por la interpretación. Para ello, se formó en el Washington College y, posteriormente, se abrió camino hasta llegar a Nueva York y estudiar en el famoso instituto de teatro Lee Strasberg.
Hermana gemela
La actriz tenía una hermana gemela, Leslie Hamilton Freas, quien falleció en 2020. Las causas del deceso no fueron reveladas oficialmente, pero se habla de una enfermedad relacionada con el Covid.
Chica dura
Su gran oportunidad llegó con una película que suponían que no tendría mucho éxito: Terminator (The Terminator). No podían estar más equivocados y el filme protagonizado por ella misma y Arnold Schwarzenegger se convirtió en una película de culto y el origen de una exitosa saga.
Una gran amistad
Al comienzo del rodaje de Terminator, Linda no tomaba en serio a Arnold, al considerarlo un culturista y no un actor. Pero terminó cambiando de idea y comenzó una amistad que continúa hasta nuestros días. Tanto es así, que cuando Schwarzenegger se presentó a Gobernador de California por el partido republicano, Hamilton le votó pese a haber sido demócrata toda su vida.
La saga continúa
La película tuvo tanto éxito que siete años después llegaría la segunda parte, Terminator 2: el juicio final (Terminator 2: Judgment Day), dirigida y producida por James Cameron.
Un accidente que cambió su vida
Pero no todo fueron alegrías para Hamilton. Durante el rodaje de Terminator 2, sufrió un accidente que le provocó una discapacidad de por vida. Durante una de las escenas de acción, utilizaron armas reales para hacerlas más realistas y el ruido de una detonación le causó una lesión auditiva que continúa arrastrando.
‘Terminator’ continúa sin ella
La saga continuó con Terminator 3: la rebelión de las máquinas (Terminator 3: Rise of the Machines), Terminator Salvation y Terminator Génesis (Terminator Genisys), pero ninguna de estas películas contó con Linda Hamilton. ¿Por qué? Porque ella misma rechazó el papel, argumentando que el arco de su personaje se había completado en las dos primeras entregas.
Un segundo éxito
A nivel interpretativo, Hamilton cosechó otro gran éxito, en este caso televisivo, gracias a la serie La Bella y la Bestia, que se emitió en la CBS desde 1987 hasta 1989. Compartió protagonismo con un irreconocible Ron Perlman y ganó un Globo de Oro por su interpretación.
Otros trabajos en el cine
Con mayor o menor repercusión, Hamilton no ha dejado de trabajar. En su filmografía destacan títulos como Un testigo en silencio (Silent Fall) o Un pueblo llamado Dante’s Peak (Dante’s Peak).
También ha trabajado en TV
No sólo ha trabajado para la gran pantalla, sino que también ha aparecido en series como Chuck o Desafío (Defiance).
Vuelve a ser Sarah Connor
Junto a su colega Arnold volvió a la gran pantalla gracias a Terminator: Destino oscuro (Terminator: Dark Fate), nueva entrega de la franquicia, esta vez dirigida por Tim Miller (Deadpool).
Trastorno bipolar
Después de sufrir durante dos décadas, Hamilton fue diagnosticada de trastorno bipolar. Lejos de hundirla, este diagnóstico permitió que comenzara a ser tratada para conseguir llevar una vida normal, algo que le resultaba complicado.
Primer matrimonio
Linda Hamilton se casó en 1983 con el actor Bruce Abbott, al que conoció durante el rodaje de la serie King’s Crossing, y con quien tuvo a su primer hijo, Bruce Abbott. Pero el matrimonio no duró, y se divorciaron en 1989 porque su trastorno bipolar hacía su matrimonio inviable.
Se enamoró de James Cameron
Durante el rodaje de Terminator 2 se enamoró de James Cameron, que por entonces estaba casado con Kathryn Bigelow. El director se divorció e inició un turbulento romance con Hamilton repleto de rupturas y reconciliaciones. En 1993 tuvieron su primera hija, Josephine y en 1997 pasaron por el altar.
Uno de los divorcios más cuantiosos
El mismo año de su boda, durante el rodaje de Titanic, Cameron le fue infiel a Hamilton con la actriz Suzy Amis. Cuando se enteró, dejó al director e inició el que sería uno de los divorcios más caros de la historia por el que la actriz percibió 50 millones de dólares.
