La trampa, la nueva película de M. Night Shyamalan, se basa en una premisa de lo más rocambolesca. Y es que según afirma el propio director, todo se reduce a una simple pregunta: “¿Qué pasaría si El silencio de los corderos sucediera en un concierto de Taylor Swift?”. GU-A-U.
La trampa es un thriller psicológico que tiene como protagonista a Josh Hartnett, que tras ponerse en la piel de un físico nuclear en Oppenheimer se convierte en un retorcido asesino en serie al que conocen como El Carnicero.
La trama comienza cuando Cooper (Josh Hartnett) y su hija adolescente se disponen a pasar una noche juntos en un concierto de la estrella del pop Lady Raven (Saleka Shyamalan). Pero, en realidad, el concierto es una trampa tendida por un policía que quiere dar caza al Carnicero, y la música se convertirá en la clave para su supervivencia.
Opiniones divididas
La crítica está dividida, como con la gran mayoría de películas de Shyamalan desde que dejase al mundo impresionado con El sexto sentido. Los hay que consideran que es una de las mejores películas del director en años, posiblemente desde El Bosque. De esta opinión son Rodrigo Perez, de The Playlist, y Nick Newman, de The Film Stage, asegurando este último que es “la obra de entretenimiento más pura que ha hecho nunca”. Para William Bibbiani, de The Wrarp, se trata de un filme “diabólicamente divertido”, aunque según Megan Navarro, de Bloody Disgusting, lo que más destaca de la película son “sus personajes, profundos y complejos”.
Pero también hay opiniones completamente contrarias. Owen Gleiberman, de Variety, considera que los giros a los que nos tiene acostumbrados Shyamalan son, en La trampa, completamente artificiosos. “Pedirle al público que acepte algo tan inverosímil roza el insulto“, asegura. Richard Roeper, de Chicago Sun-Times, considera que es “un absurdo thriller psicológico” con un “final absolutamente desastroso”. Por otro lado, tanto en Detroit News como en Collider la describen de una manera: risible.
Y luego existen otro grupo de críticos que sólo destaca como válida la actuación de Josh Hartnett. Brian Tallerico, de rogerebert.com, considera que él es casi lo único que hace que merezca la pena verla y Lovia Gyarkye, de The Hollywood Reporter, asegura que el trabajo de Hartnett es lo único que mantiene a flote un thriller mediocre. De la misma opinión es Pete Hammond, de Deadline, que cree que el actor “se esfuerza, pero no puede salvar este enrevesado thriller de asesinos en serie”. Y también Jordan Hoffman, de Entertainment Weekly, que tira de humor asegurando que “Ver a Hartnett intentar mantener la calma por fuera mientras está flipando por dentro es impresionante”.