Malena Costa nació el 31 de agosto de 1989 en Alcudia, Mallorca. Su padre es mallorquín y su madre sueca, de ahí que su segundo apellido sea Sjögren.
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Malena Costa comenzó en el mundo de la moda con tan solo 11 años, en el 2000. Pero fue cinco años después cuando se presentó al certamen Elite Model Look 2005 y se convirtió en una persona conocida para los medios. Poco después, con tan sólo 17 años, Malena Costa participó (como hicieron también otras modelos como, por ejemplo, Alba Carrillo) en el programa de televisión Supermodelo, que emitió la cadena Cuatro en sus inicios, y en el que quedó sexta finalista. Desde entonces su fama comenzó a subir como la espuma y eso le permitió trabajar con importantes firmas como Don Algodón o Swatch.
No obstante, una vez terminado el programa la mallorquina continuó con sus estudios de ESO, ya que sus aspiraciones se dirigían en un principio hacia el mundo de la veterinaria. De hecho, le encantan los animales y ha realizado varias campañas a favor de protectoras. En concreto, los perros son su debilidad y tiene un bulldog francés llamado Roco, regalo de su actual pareja el futbolista español de la Fiorentina Mario Suárez.
En esa época, con 17 años, Malena Costa compatibilizaba sus estudios con sus trabajos en el mundo de la moda, la interpretación y la publicidad. Sin embargo, finalmente ser veterinaria quedó en un sueño por cumplir y la mallorquina se decantó por la moda. Su primer contrato fue con la empresa Elite Model Managment y participó entonces en varios spots publicitarios.
Su destino no era ese, ya que la vida la llevó por otros derroteros y en la actualidad sigue siendo una de las modelos con más éxito de nuestro país. Malena Costa tiene unas medidas de infarto: mide 1’76 de altura y 89-67-92. Unas medidas que le aseguran el éxito tanto en la publicidad como en el mundo de la moda. Tanto es así que ha desfilado para importantes firmas como Calzedonia o Women Secret, y verla en las grandes pasarelas de moda de cada año es ya una costumbre. Pero esta mallorquina de 26 años no solo se dedica a desfilar y a la publicidad.
La modelo es aficionada al spinning, la hípica, la pintura y el pilates. En su tiempo libre le gusta pasar tiempo con sus amigas y escaparse siempre que puede a su tierra, Mallorca.
Además, Malena Costa tiene un blog personal donde habla sobre su rutina y comparte sus trucos de belleza. Además, aprovecha para compartir con todos sus seguidores los looks que luce cada día, los viajes que hace con sus amigos y, por supuesto, con su pareja, el futbolista Mario Suárez y habla sobre su gran pasión en la vida: los animales.
En cuanto a las redes sociales, la modelo mallorquina es una gran fan de Instagram. Tiene nada más y nada menos que 190.000 seguidores y a ellos les enseña su día a día, sus proyectos, su familia. Su lado más personal. Además, utiliza también Twitter donde tiene más de 250.000 seguidores.
Sus relaciones más sonadas
Malena Costa se enamoró nada mas salir de Supermodelo del hijo del presidente de la compañia Halcón Viajes, el empresario Javier Hidalgo. Ella tenía 19 años, él 36. Fueron poco más de 24 meses de romance que finalmente terminó, pero del que aún mantienen una bonita amistad.
Una vez concluida esta relación, Malena Costa volvió a enamorarse de un hombre notablemente mayor que ella: el ex futbolista del Barça Carles Puyol. 21 años tenía ella y 32 él. La cosa fue bien hasta que, según diferentes testimonios, la relación se torció por culpa de los celos de Carles Puyol. Y, así, casi de un día para otro, el futbolista decidió que lo mejor era separarse. Fue la pareja de moda de 2011 y las fotografías de ambos juntos y felices circularon por toda la prensa. Dos años en los que la modelo aprovechó para abandonar Madrid e irse a la ciudad condal junto al ex centrocampista.
Sin embargo, cuando volvió a la capital la modelo se olvidó de su ex y empezó a aprovechar la noche madrileña. Fue entonces cuando se le relacionó con otro futbolista: el mismísimo Cristiano Ronaldo. Ella siempre lo negó, pero las informaciones apuntaban a que la pareja había tenido más que palabras en una de esas salidas de Malena Costa.
Y de un futbolista pasó a otro. Finiquitada la relación con Puyol, Malena Costa halló consuelo en el centrocampista Mario Suárez, con el que desde 2012 mantiene uno de los noviazgos más sólidos del panorama actual. Según ha dicho la propia Malena, lo suyo fue un verdadero flechazo. Además, al parecer, ella asegura que no sabía ni tan siquiera que era un futbolista. Sea como fuere, hoy son una de las parejas más unidas.
Tanto que, incluso, la modelo se ha mudó con el ex futbolista del Atlético de Madrid a la ciudad italiana de Florencia, tras el fichaje de este por La Fiorentina en 2015, y posteriormente a Inglaterra, ya que Mario Suárez fichó por el Watford inglés en enero de 2016.
El vestido de novia de Malena Costa
El futbolista y la modelo se dejan ver sin problema y comparten con sus fans su día a día en las redes sociales. Y fue en Instagram, en octubre de 2015, donde la propia Malena anunciaba que se casaba con su chico. Lo hacía subiendo una foto de ambos acompañada de las siguientes palabras:
Donde en un primer momento, y siempre según las propias palabras de ella, no había planes inmediatos de formalizar la relación, se tornó en un inminente compromiso.
En enero 2016, Malena Costa y Mario Suárez también tenían el placer de comunicar que estaban esperando a su primera hjia, haciendo de este año uno de los más especiales e importantes de lo que llevan de noviazgo.
“Matilda Suárez Costa ya está con nosotros… Sobran las palabras”, escribía el jugador tras en nacimiento de su primera hija, el pasado 28 de junio.
Sólo dos semanas después, Malena mostraba lo estupenda que volvía a estar con una foto en bañador en su perfil de Instagram bajo el hashtag #todovuelveasulgar; lo que generó una oleada de críticas que la acusaban de haber trucado la foto o de haberse sometido a cirugía para recuperar la figura en tan poco tiempo.
“Me sentí feliz y lo quise contar al mundo, para que también muchas mujeres que están embarazadas sepan que el cuerpo suele volver a su ser, antes o después”, se defendía la modelo en su blog de Glamour. “Mi parto fue natural gracias a Dios y no tuve ningún cirujano estético, así que que todo vuelva a su sitio será obra de mi fuerza de voluntad y constancia con el deporte y la comida”, añadía.
A principios de 2017 se conoció la noticia de la llegada de un segundo hijo para la pareja, que retrasaba sus planes de boda (de nuevo) hasta que la modelo diese a luz.
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Fotos: Cordon Press e Instagram
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