Tuvo el honor de ser la primera australiana en convertirse en ángel de Victoria´s Secret aunque seguramente a Miranda Kerr le satisfaga más estar incluida en una lista mucho más selecta: la de las 10 top models mejor pagadas del mundo. Cuatro millones de dólares de ingresos en 2012, según la prestigiosa revista Forbes.
Miranda vivió en el campo, en Australia, y durante su infancia y adolescencia dedicó el tiempo libre a montar a caballo o en moto. Cuando su familia se muda a Brisbane, una pequeña ciudad de Nueva Gales del Sur, da comienzo su carrera como modelo. Sin acabar siquiera la escuela secundaria ya está posando para los fotógrafos. Pero nadie piense que Miranda es una chica sin conocimientos académicos: en sus biografías oficiales consta que ha estudiado Nutrición y Psicología de la Salud en la presuntamente prestigiosísima y absolutamente desconocida Academy of Natural Living.
Lo que importa es que Miranda ya en 2003 está en París haciendo campañas para Billabong, Roxy y otras marcas. De allí a Nueva York, donde es protagonista de publicidades para Cavalli o Clinique. Portadas de revista se las ha hecho todas: Elle, Cleo, Cosmopolitan, Vogue, Harper´s Bazaar. La ha fotografiado, por supuesto, como corresponde a toda diva del modelaje, Terry Richardson. En concreto, para un calendario Pirelli. Y entre 2007 y 2013 ejerce de ángel de Victoria´s Secret. Una de las imágenes más potentes de este periodo es aquella en la que aparece luciendo el sostén de alta joyería que la firma lanza en 2010: dos millones y medio de dólares sobre las curvas de Miranda.
En 2003 Miranda está saliendo con el corredor de bolsa Adrian Camilleri, que le sale rana tanto en lo personal como en lo financiero. El chaval es empurado por la Comisión Australiana de Valores e Inversiones por cinco cargos de fraude y, encima, Miranda se percata de que Adrian le ha birlando una jugosa cantidad de dólares. Decide no denunciarle pero, eso sí, la relación resulta finiquitada de inmediato.
Otro novio que se menciona siempre en su biografía es Jay Lyon, cantante del grupo Tamarama. Miranda aparece en un videoclip de la banda: Everything to me. Estuvieron cuatro años juntos.
Pero el gran amor de Miranda llegaría en 2007: el actor Orlando Bloom. Se conocen, se enamoran y se casan en Los Ángeles en 2010. En 2011 tienen su primer hijo y le colocan el desmesurado nombre de Flynn Christopher Blanchard Copeland Bloom. La parejita se prodiga en fotografías cariñosas, exhiben al bebé alimentándose el pecho de la guapa mamá y son, a juzgar por lo acaramelados que se les ve, muy felices. Hasta que en 2013 llegó la ruptura de la pareja.
Miranda cuida su pelo con coco y vinagre y es un tanto maniática de la vida sana. Sólo consume agua “alcalina” y purifica su casa mediante decenas de plantas que coloca a lo largo y ancho de todo el hogar.
