¿Recuerdas a Rebecca de Mornay?

En la imagen de arriba tenemos a una sonriente Rebecca de Mornay en la presentación de una versión restaurada del western clásico Rio Bravo. Los Ángeles, abril de 2023. De este modo sorpresivo nos hemos reencontrado con una actriz que fue un icono de los 90.

Algunos de los títulos que protagonizó esta actriz son piezas que provocan hoy añoranza y se incluyen en la memoria sentimental de una generación (o varias).

Por ejemplo, La mano que mece la cuna (1992), en la que interpreta a una vengativa niñera que se gana la confianza de la madre del bebé que cuida, para destrozarla y quedarse con su familia. Tuvo un gran éxito con esta interpretación, pero al igual que le ha pasado a otros muchos, su trabajo la encasilló en papeles de villana.

Pero tuvo otros muchos éxitos, empezando por su primera película, Risky Business, protagonizada por un joven y casi desconocido Tom Cruise, y que tuvo un gran éxito de taquilla. Su interpretación de una joven prostituta que acaba montando un negocio en la casa de Cruise, mientras los padres de este se encuentran de viaje, le valió críticas muy positivas.

Una clara muestra de ese encasillamiento del que os hablábamos antes, es su papel en el thriller erótico Nunca hables con extraños, protagonismo que compartió con Antonio Banderas. En la película interpreta a una psicóloga criminalista que comienza una turbia relación con Tony Ramírez, un atractivo desconocido que la aborda en una tienda. Pero prácticamente a la vez comienza un acoso hacia su persona que luego se descubre que lo provoca ella misma debido a un trastorno de personalidad múltiple provocado por su abuso cuando era niña.

En El abogado del diablo (la de 1993, no te equivoques con la película del mismo nombre protagonizada por Keanu Reeves, Al Pacino y Charlize Theron) compartía muy tórridas escenas con Don Johnson. En la película interpreta a una brillante abogada que tiene que defender a un elegante y arrogante playboy mujeriego acusado de asesinar a su acaudalada esposa. Como no, la abogada es seducida por el personaje interpretado por Don Johnson, pero pronto descubre sus secretos y su vida corre peligro.

Mientras seguía participando en películas destinadas al cine, también trabajaba en películas y miniseries para la televisión, a razón de una o dos producciones por año, convirtiéndose esta en su principal ocupación. Pero también ha hecho sus pinitos en el teatro, sobre todo en producciones montadas en teatros de Los Ángeles, como en el Pasadena Playhouse.

En resumidas cuentas, la carrera cinematográfica de Rebecca de Mornay tenía todas las papeletas para convertirse en una de las más fulgurantes de la meca del cine, pero bien por su encasillamiento, por decisiones cuestionables a nivel profesional o por elección personal, poco a poco sus papeles fueron bajando de nivel. Aún así, la actriz que actualmente cuenta con 63 años continúa en activo y la actuación continúa siendo su principal medio de subsistencia.

Es más de los que pueden decir muchos y muchas.