De Cannes a Nueva York: el primer largometraje en inglés que rodará Almodóvar

Parece que ahora sí, que Pedro Almodóvar dará el salto. La noticia ha saltado en Cannes, donde el manchego estaba presentado su cortometraje Extraña forma de vida, que ha cautivado a la crítica.

El periodista Gregorio Belinchón lo recogía en El País: Almodóvar confesaba que ya buscado localizaciones en Nueva York para rodar con dos actrices de habla inglesa su primer largometraje de habla no hispana.

Quizá Almodóvar ha perdido el miedo con Extraña forma de vida, su corto con Pedro Pascal y Ethan Hawke, atípico western homoerótico.

 

Pero, entonces, ¿qué pasó con Manual para mujeres de la liimpieza, proyecto en el que iba a dirigir a Cate Blanchett y del que, inesperadamente, se desvinculó?

Lo ha contado crudamente en una entrevista en IndieWire.

Hasta este momento, lo poco que se sabía de la cancelación del proyecto hablaba de complicaciones genéricas que dejaron en manos de Cate Blanchett los derechos del proyecto. En IndieWire, el cineasta confiesa que se vio superado por las circunstancias que rodearon al proyecto. Eso sí, desmiente por completo que el inglés fuera un problema, pues en septiembre de 2022, cuando se canceló el proyecto, ya dominaba el idioma. Claro que ese fue uno de los motivos que se adujo en ese momento.

“Incluso ahora, es muy doloroso para mí pensar en ello. Lo había hablado con Cate [Blanchett] todo el año, tuve mucho tiempo para reflexionar sobre el asunto y no le tenía miedo a los idiomas, sino a las muchas localizaciones, las muchas actrices. No estaba seguro del tiempo que me daría para ensayar”.

 

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Y es que, al ser una producción española, muchas escenas de Estados Unidos las tendrían que haber recreado en Madrid, lo que le habría llevado mucho tiempo y esfuerzo a Pedro Almodóvar. A esto se suma el hecho de haber anunciado el proyecto con mucho tiempo de antelación, generando una expectativa que tampoco ayudó en el proceso.

“Eso me acojonó. Pensé en el tiempo que tendría que pasar supervisando todo en un estudio más grande y era una pesadilla. Tenía claro que lo honesto era decirle a Cate que lo sentía pero que no podía con ello. Sé que es mi culpa y debería haberlo pensado antes pero, ya sabes, no tuve tiempo”, finaliza.