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Llueve en Cannes y así lo ha disfrutado Cate Blanchett, que ha pasado por el festival para promocionar The new boy, largometraje en el que interpreta a una monja a cuyo convento llega un niño aborigen que pondrá en cuestión todas sus creencias más profundas.

Cate Blanchet por un lado y Ester Expósito por otro. La carismática actriz española acudió a Cannes a presentar su último trabajo: Perdidos en la noche, un thriller del mexicano Amat Escalante. La internacionalización de Ester Expósito es un hecho.

Aunque antes de presentar su propia película, estuvo Ester Expósito a la gala de Black Flies, una cinta dirigida por el francés Jean-Stéphane Sauvaire, cuyo salto a Hollywood incluye a Sean Penn en el reparto.

Por cierto, a la crítica (a parte de la crítica) le pareció que Sean Penn estaba muy pasado de rosca en Black Flies. Así que no fue un estreno con grandes aplausos pero de la alfombra roja no hubo queja: modelos como Adriana Lima o Karlie Kloss acudieron a la cita.

Y luego está el gran acontecimiento de este festival: el regreso de Indiana Jones (con Palma de Honor para Harrison Ford incluída).

Harrison Ford en Cannes

Harrison Ford cumplirá 81 años en julio y, a pesar de estar en plena forma, sabe que su carrera como actor está llegando a su fin, tras más de medio siglo siendo un referente de Hollywood.

Es posible que éste, junto a otros elementos, haya sido el motivo por el que todo un héroe de acción se haya emocionado en Cannes, incluso llegando a soltar una lagrimita.

El actor acudía al Festival de Cannes a presentar la quinta y última entrega de Indiana Jones (y el Dial del Destino). Lo hizo acompañado de su esposa, Calista Flockhart, del CEO de Disney, Bob Iger, y de la presidenta de Lucasfilm, Kathleen Kennedy. Palabras mayores.

Tras el visionado de la película y una ovación canónica y silenciosa de cinco minutos. Una formalidad francesa con todas las películas pero un indicativo de que no ha entusiasmado. ¿Y eso qué importa? La ovación de la noche ya se la había llevado el alter ego de Indy, justo antes de comenzar la película.

El público enloqueció, los presentes vitoreaban a Harrison Ford y el director del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, le entregó una Palma De Oro a traición. Todo tras la emisión de un vídeo en el que se repasaba la espectacular carrera del actor quien dejó claro que no se esperaba tal homenaje, cuando no pudo disimular las lágrimas. Eso o es mejor actor de lo esperado.

“Dicen que cuando estás a punto de morir, ves tu vida pasar ante tus ojos y yo acabo de ver la mía pasar ante mis ojos. Bueno, una gran parte pero no toda. Mi vida ha sido posible gracias a mi encantadora esposa que me ha apoyado en mi pasión y mis sueños y estoy muy agradecido”, ha comentado.

Y ya que estaba allí y para despejar cualquier duda, Harrison Ford confirmó lo obvio. “Esta es la película final de la serie, y esta es la última vez que interpretaré al personaje“. Lo complicado del asunto es que, viendo la reacción del público en Cannes, parece que aparcará a Indiana Jones en, quizás, la peor de sus entregas. Para verificarlo, habrá que esperar al 30 de junio, cuando la película llega a los cines.