La historia de Sienna Miller

A Sienna Miller todos la recordamos por sus papeles en películas como Factory Girl, Stardust, Interview o The Girl, largometraje para televisión por el que fue nominada a los Globos de Oro. Pero su vida y su carrera va mucho más allá.

La británica de 41 años no ha parado de trabajar dentro del mundo de la interpretación. De hecho, la hemos podido ver recientemente en varias series de televisión y tiene algunos proyectos más en marcha. Pero, durante estos años en los que ha ido dándose a conocer al mundo -que ya son más de veinte- también la hemos podido ver trabajando como modelo, e incluso, como diseñadora de moda.

Aunque nació en Nueva York -el 28 de diciembre de 1981- se trasladó con su familia a Londres con apenas 18 meses, donde vivió hasta cumplir la mayoría de edad. Aquel fue el momento en el que regreso a la ciudad de los rascacielos para cumplir su sueño de convertirse en actriz, dando sus primeros pasos en el Instituto de Teatro y Cine Lee Strasberg.

Comenzaba así el camino de Sienna Miller en busca del éxito. Algo que no tardó mucho en llegar, pues, tras unos primeros pasos como modelo en su ciudad natal, pronto debutaría como actriz para, en pocos años, empezar a convertirse en un rostro conocido para el gran público.

De modelo a diseñadora de moda

Lo cierto es que Sienna Miller y el mundo de la moda, siempre han ido de la mano. Y es que, ya en Londres, trabajó como modelo fotográfica para Tandy Anderson, fundadora en 1977 de la agencia Select Models junto a las hermanas Clare y Chrissie Castagnetti.

Estrechamente ligada al estilo de la moda conocido como boho chic, Miller ha trabajado a lo largo de su carrera como modelo para marcas como Coca-Cola y firmas como Vogue Italia, Burberry o Prada, además de ser embajadora del perfume BOSS Orange, por poner algunos ejemplos.

Pero vivió un punto de inflexión (por llamarlo de alguna manera) en el año 2006, cuando firmó un contrato de dos años con Pepe Jeans London para la campaña publicitaria de sus pantalones vaqueros. Aquel acuerdo, le daría una nueva oportunidad en su carrera: la de convertirse en diseñadora de moda.

Y es que ese mismo año, Sienna Miller diseñó una colección cápsula para la firma británica, para los que no lo entiendan, una colección formada por un conjunto de prendas y piezas que en si mismo conforman un outfit o un look completo.

La cosa funcionó tan bien que dio lugar, en 2007, a Twenty8Twelve, su propia marca de moda, que debe su nombre a la fecha de nacimiento de Sienna y el respaldo financiero de Pepe Jeans y en la que cuenta con la inestimable de ayuda de su hermana Savannah Miller, que es diseñadora de moda profesional.

 

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Hoy, su ropa puede comprarse en las tres pequeñas boutiques con las que cuentan en la ciudad de Londres, o bien, a través de la venta online en plataformas de venta de ropa, la única forma de hacernos con alguna de sus prendas en España.

Más de 20 años en la interpretación

Pero si por algo es conocida Sienna Miller es por su faceta de actriz. Un rol que comenzó poco después de regresar a Nueva York, en 2001, cuando debutó en la película South Kensington, junto a Rupert Everett y Elle Macpherson.

A partir de ahí empezaría a encadenar pequeños papeles y papeles secundarios hasta que en 2005 le llegó su primer protagonista en la comedia romántica Casanova, junto al desaparecido Heath Ledger. Y, solo un año después protagonizaría también Factory Girl, interpretando a Edie Sedgwick, amiga y musa de Andy Warhol sobre la que versa esta historia y que, a Miller, le dio mucha visibilidad.

Tras ella, llegarían títulos como Interview (2007), bajo las órdenes Steve Buscemi, por la que fue nominada en los Independent Spirit Awards; Stardust (2007), junto a Michelle Pfeiffer y Robert De Niro; En el límite del amor (2008), con Keira Knightley; G.I. Joe (2009); The Girl (2012), para la televisión y por la que fue nominada a los Globos de Oro; Una historia de amor (2013), que coprotagonizó con Justin Long y Evan Rachel Wood; o, más recientemente, Z, la ciudad perdida (2017), dirigida por James Gray y en la que aparece junto a Charlie Hunnam y Robert Pattinson.

Cierto es que su filmografía no cuenta con grandes títulos, pero Sienna Miller no ha parado, trabajando incluso en el teatro, protagonizando en Broadway y en el Theatre Royal Haymarket de Londres, por ejemplo, la obra Patrick Marber After Miss Julie, entre los años 2010 y 2011.

Y ahí sigue, porque, tras protagonizar Sin rumbo (2020), de Tara Miele -su última película hasta la fecha-, este pasado 2022 la hemos podido ver en hasta tres series: en un episodio de Extrapolations, en dos de Chivalry como Lark; y en los seis episodios de Anatomía de un escándalo, para Netflix, donde ha aparecido interpretando el papel de Sophie Whitehouse, la protagonista de esta producción británica dirigida por S.J. Clarkson.

¿Y qué pasa a partir de ahora? Pues que ya está preparando sus próximos proyectos. ¡Apunten estos nombres! My Mother’s Wedding, de Kristin Scott Thomas; Horizon, de Kevin Costner; y Raised Eyebrows, donde trabajará bajo las órdenes de Oren Moverman. No las perderemos de vista…

Jude Law: historias de amor y desamor

Hablar de la vida privada de Sienna Miller inevitablemente nos recuerda a Jude Law. La pareja se conoció en 2004 durante el rodaje de Alfie, una comedia romántica escrita y dirigida por Charles Shyer que acabó para ellos en romance.

Pero aquella relación acabó siendo tan fugaz como lo son algunas estrellas que surcan el firmamento. Se había comprometido a finales de aquel año 2004, pero en julio de 2005 todo se rompió después de que el actor confesara un lío amoroso con Daisy Wright, la niñera de sus hijos que trabajaba para su exesposa, la también actriz inglesa Sadie Frost.

Años después, en una entrevista al medio digital The Daily Beast en 2020, Sienna Miller confesó que no solo se vio impactada por la ruptura con Jude Law -con quien pretendía casarse- y con el hecho de que él la hubiera engañado, sino que aquello le supuso un trauma mucho mayor al ser una historia que se expuso en exceso a través de los medios de comunicación convirtiéndola, según sus palabras, en “víctima de una persecución”.

“Con ese nivel de exposición pública de mi ruptura, tener que salir de la cama yo sola para ponerme frente a 800 personas era la último que querías. Estaba en un tremendo shock tras todo aquello. (…) Otra situación que resultó complicada fue toda esa locura de los paparazis. Sabían donde iba a estar noche tras noche“, recordó mientras sentenciaba que “Fue muy difícil. Solo tenía 23 años, pero si puedes superar eso, puedes con cualquier cosa”.

Y sí, vaya si lo superó. Tanto que en 2009 saltó la noticia de que se habían reconciliado y estaban volviendo a salir juntos tras reencontrarse en Broadway. Pero nada más lejos de la realidad. En 2011 anunciaron de nuevo su ruptura, esta vez de forma menos mediática y definitiva (de momento).

En medio de sus dos noviazgos, llegaron otras parejas como los actores Rhys Ifans, Balthazar Getty o el DJ George Barker y, posteriormente, otros como Tom Sturridge, con quien tuvo su primera hija, Marlowe Ottoline Layng. Su relación terminó en 2015 aunque dejó aquel legado para siempre.

No se le han conocido más parejas hasta la fecha, pero, desde luego, el nombre de Jude Law, será el que quede marcado para siempre en la vida amorosa de Sienna Miller, que continúa con su carrera profesional, mientras dedica el resto de su tiempo a labores solidarias, siendo embajadora mundial de International Medical Corps, embajadora en el Reino Unido de Starlight Children’s Foundation, a parte de su apoyo a Breast Cancer Haven, un centro de ayuda contra el cáncer de mama.

Una historia, la de Sienna Miller, a la que le quedan muchos capítulos por escribir, en lo personal y, sobre todo, en lo profesional. De momento ya conocemos algunos de sus próximos proyectos, así que nos mantenemos expectantes…

ANTONIO SÁNCHEZ

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